Juan Román Riquelme, quien se transformó en el máximo goleador en Copa de Boca después de haber convertido el único tanto en el Centenario en el choque con Nacional, analizó las acciones después del 1-0. “Se puso difícil con la expulsión e inconscientemente nos metimos un poco atrás, pero ganamos. Ahora queremos hacerlo bien en casa contra Barcelona”, comentó el enganche, una de las figuras
Crédito foto: El Observador
Ya con el importantísimo triunfo que le da vida en la Copa Libertadores asegurado, Juan Román Riquelme encaró los micrófonos con mucha tranquilidad por el deber cumplido. “Se puso difícil con la expulsión de ‘Chiqui’ Pérez, pero pudimos ganar”, expresó el autor del único gol del partido.
Siguiendo con el análisis del triunfo, que le permitió a Boca acceder al segundo lugar de la tabla, el enganche trató de explicar cuáles fueron los motivos que llevaron a que el equipo termine metido muy atrás en su área: “Los primeros diez minutos jugamos muy bien, luego inconscientemente nos metimos atrás y ahí les dimos la chance a ellos”.
“Pero nos acomodamos y logramos lo que más necesitábamos, que era ganar. Ahora sabemos que dependemos de nosotros. Esperamos hacerlo bien en casa, porque la Copa está rara, ganan siempre los equipos visitantes. Vamos a jugar con Barcelona y si sumamos de a tres vamos a estar cerca de clasificar. Siempre dependimos de nosotros, asique estoy tranquilo”, puntualizó Román.
Para terminar, no quiso hablar de su gol, que le permitió transformarse en el máximo goleador de Boca en la historia de la Copa Libertadores, sino que destacó la imagen de su compañero y amigo Clemente Rodríguez, quien pasó a ser el argentino que más veces jugó dicho certamen: “Es un orgullo y somos afortunados de jugar con Clemente, esperemos que pueda seguir sumando partidos. Todo el vestuario está orgulloso de él y para todos es un sueño compartir un partido con él”.
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